martes, 25 de septiembre de 2012

QUÉ ESPERAS PARA AMARTE?


Cualquier relación de amor, incluida la que tienen consigo mismos, se debilita si está basada en fantasías. Cuando lo que les gusta de alguien es algo irreal o ilusorio, tarde o temprano asumirán un desengaño.
Por eso no hace falta mirarse en el espejo e imaginar algo que éste no proyecte, deben verse tal como realmente son y aún así sentirse hermosos, perfectos y felices.

Pero es cierto que muchas y muchos de ustedes con un bajo nivel de autoestima deben revisar la imagen que tienen de sí mismas, porque normalmente esa autoimagen está distorsionada y suele mostrar rasgos que en general son perfectamente normales, pero que aparecen exagerados como si se tratara de defectos inaceptables.

La idea es que deben verse tal como son… y aún así aceptarse y amarse incondicionalmente.

Todos pueden hacer una lista de las cosas que les gustaría tener y no tienen… y tal vez nunca puedan alcanzar (porqué no se esfuercen a por ello). Pueden ser rasgos o cualidades personales o pueden tener que ver con su realidad “exterior”, relacionadas con su responsabilidad, sus bienes, sus relaciones, etc.
Pero hay diferentes maneras de desear. Tienen muchos deseos que pueden cumplirse o no sin que esto les afecte profundamente. Pero cuando sienten que su felicidad depende de alcanzar determinadas metas, cuando sienten que para su felicidad se exigen que se cumplan primero determinadas condiciones, entonces están de verdad en serios problemas.
Es que la verdadera felicidad es un estado interno que no tiene que ver con posesiones ni relaciones ni rasgos personales. Es un estado de plenitud que tiene lugar en su interior y que en gran medida es independiente de sus circunstancias y de sus cualidades.

Algunas premisas importantes que confirman esta proposición:

Si la felicidad depende de “algo” (ese “algo” puede ser cualquier cosa), entonces se sentirán infelices si no lo consiguen o profundamente bajo una inseguridad total si lo tienen porque lo quieren perder.
Muchas personas que “lo tienen todo” (dinero, juventud, belleza, etc.) no son felices, viven en depresión, angustia, inseguridad, etc.

A veces consiguen algo que habían anhelado durante mucho tiempo, que era realmente importante para ustedes. Pero, ¿cuánto duró esa “felicidad”? Seguramente sólo un tiempo limitado.
Todos y todas conocen a alguien que parece conservar la alegría y el optimismo aún en circunstancias muy desfavorables… o no?
Los niños y las mascotas parecen conocer un milagroso secreto para estar contentos en casi cualquier circunstancia. Y si alguien argumenta que se debe simplemente a que ellos no piensan ni razonan como una persona adulta, entonces habrá que reflexionar acerca de si no será hora de que ustedes los humanos dejen de pensar y de razonar tanto.

Sin excepciones cada momento encierra elementos maravillosos de los que puedan disfrutar… aunque sólo sea durante los breves instantes en que sean capaces de sostener su atención, contemplar y apreciar lo bueno a su rededor.
En la medida que aprendan a regalarse el placer de disfrutar quiénes son y de las cosas que sí tienen, seguramente que aprenderán a valorarse y a quererse tal como son, en la comprensión de que no importa que no puedan cambiar muchas cosas de ustedes mismos o de su realidad, porque aún así son perfectamente capaces de ser felices, de vivir con alegría, plenitud y paz.
Y entonces aprenderán a dar GRACIAS por todo cuánto poseen!

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Para comentar, favor de registrarte.