CÓMO SE PUEDE PERDONAR?

SUBRAYADO ES MUY IMPORTANTE

Una situación muy frecuente: Las personas que una y otra vez se quedan atrapadas en situaciones en las que son tratadas de manera desconsiderada (o humilladas, traicionadas, ignoradas, etc.) es muy probable que así se traten a sí mismas cada día. Las situaciones externas recrean esos dolorosos conflictos internos que normalmente no pueden o no quieren descubrir en ustedes

Muchas veces consiguen perdonar cuando la ofensa queda ya muy atrás en el pasado o se alejan definitivamente de la persona que sienten que los ofendió.

Pero este no es el verdadero perdón sino que tiene más que ver con olvidar, y el hecho de que todo el proceso normalmente lleve mucho tiempo parece confirmarlo.

El verdadero perdón es algo completamente diferente y sólo es posible si son capaces de “despertar”, de liberarse de creencias equivocadas, y de pasar a un nivel superior de consciencia.

Por ejemplo: Si alguien tiene una deuda hacia ti y decide no devolverte lo que te debe, de seguro te vas a enojar… Y MUCHO!. Pero si aprendes a atraer a tu vida un nuevo nivel de abundancia en lo material (como muchas personas lo han logrado), si realmente ya no tuvieras ninguna preocupación por lo económico, es probable que la misma pequeña deuda ya no te importe tanto verdad?.

Del mismo modo:

Si consigues pasar a un nivel superior de fortaleza emocional, si puedes  desarrollar un mayor nivel de autoestima, entonces lo que hoy tanto te molesta de la conducta de los demás simplemente dejará de preocuparte y vivir así, es conocer LA FELICIDAD.

Sí cambias, los demás perciben tu nueva posición y comienzan a tratarte con más respeto y atención.

Una buena idea cuando tengas conflictos y dificultades para perdonar es volver tu atención hacia tu mundo interno y comprometerte firmemente a aceptarte, a quererte y a cuidarte, es decir, a desarrollar un mayor nivel de autoestima…

Porque si te sientes a gusto tal como eres, si tienes una relación saludable con contigo mismo o contigo misma, si eres capaz de verte amorosamente en cualquier circunstancia, es decir, si te quieres sin condiciones, entonces, ejerciendo tu milagrosa facultad de crear la propia realidad, harás que tu vida refleje la paz, la armonía y el bienestar que desarrollas primero en tu mundo interior.

Para así ofrecer lo mejor de ti a los demás y recibir lo mejor de los demás para ti.